miércoles, 3 de marzo de 2010

Perder el empleo, ¿una oportunidad para emprender?

Hace unas semanas, durante mi pocos momentos twitteranos que dispongo últimamente, leí un twitt de @seniormanager en el que comentaba que perder el empleo no debe ser el motivo por el cual uno deba emprender. En este caso (y no hay muchos) no puedo estar de acuerdo. Es posible que no deba ser el motivo principal, pero muchas veces representa el empujón que algunos necesitan para poderse tirar a la piscina. Emprendedores que aunque tienen muchas ganas, ilusiones e ideas, la situación familiar y el apalancamiento representa en muchos casos un obstáculo para dejar de lado la seguridad de una remuneración estable y lanzarse a una aventura económica.

Foto de Jerónimo Palacios

No veo problema en que una vez la varita de la crisis toca nuestra puerta o la de la empresa donde trabajamos, veamos como opción dar rienda suelta a nuestro yo-emprendedor. ¿Busco un nuevo trabajo que esté en línea con mis necesidades económicas y perfil profesional, o aprovecho la situación y el dinero del despido, para llevar a cabo esa idea que me ha rondado por la cabeza durante años y que poco a poco he ido desarrollando hasta convertirla en un posible negocio? El empujón se acaba convirtiendo en un estímulo adicional.

En mi caso después de cuatro años con la firme convicción de que lo mío era emprender, de montar un negocio propio con mis propias reglas, no ha sido hasta que se ha producido una situación incómoda en la empresa dónde trabajaba como asalariada, cuando he visto una oportunidad de hacer realidad mi ilusión. Era el momento. Y lo he aprovechado. Y confío que haya sido la decisión adecuada.

Porque en definitiva... ¿un emprendedor nace o se hace?. Ésta pregunta ya da para un nuevo post, pero nos os dejo sin dar antes mi opinión: es una conjunción de ambas, debe nacerse con una predisposición al emprendimiento, pero si no se cuenta con una formación adecuada y una idea inicial, poco podrás emprender. Ahí dejo eso.

7 comentarios:

  1. Creo que tanto @seniormanager como tú estáis comentando lo mismo. La única razón para emprender no debe ser perder el trabajo. Creo que en este caso has visto mucho más claro que es mejor el proyecto que puedes llevar a cabo de forma personal que en el que estás en la actualidad y por eso has dejado la empresa.

    Mucha suerte con tu proyecto!

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  2. Antes de nada, enhorabuena por haber tomado esa decisión!! Seguro que no pararás de cosechar un éxito tras otro. Y los compartirás con nosotros vía twitter.

    Estoy de acuerdo con la conclusión a la que habéis llegado: perder el empleo no debe ser la única razón para lanzarse a la piscina, pero sí es un buen empujón.

    Respecto si se nace o se hace... Me lo pones difícil. Si me tengo que decantar por una de las dos me decanto por se hace. Lo que en un momento de tu vida de parece una idea completamente descavellada, en otra será la mejor idea que has tenido nunca. Aunque... si ya te lo has planteado... Se nace? Esperaré a ver a qué conclusión llegáis entre todos.

    Ánimos en esta nueva etapa!

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  3. Cualquier momento es bueno si la persona emprendedora tiene decisión y objetivos claros. La pérdida de un trabajo puede ser uno de los desencadenantes que conduzca a un cambio de vida.

    Saludos y enhorabuena por su blog.

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  4. No podría estar más de acuerdo, la única razón para emprender no debería ser perder el empleo, sin embargo, a veces un estímulo como este es el empujón final que nos faltaba para lanzarnos a la piscina de cabeza.
    Lo importante es que lo has hecho, que vas a realizar tu sueño y que todo ello te llevará de cabo a un sin fin de nuevos proyectos y oportunidades.

    Creemos en ti!

    Un abrazo enorme y suerte!!

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  5. Gracias a todos por vuestros comentarios y vuestros ánimos.
    Es un camino diferente el del emprendedor. Lo importante es tomar la decisión y no desfallecer ante las posibles dificultades.

    ¡Animo emprendedores!

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  6. Muy interesante el "post", Esther.
    Pero ¿qué me decís cuando el motivo por el que abandonas-o-te-invitan-a-ello tu trabajo, una profesión que amas y que has desarrollado durante 23 años por motivos de salud?
    ¿Qué ocurre cuando NI una enfermedad física crónica ha podido apagar tu espíritu emprendedor, tu inquietud intelectual?
    ¿Cómo enfocar tu vida profesional cuando ello ocurre en pleno ecuador laboral (23 años trabajados a los 45 de edad= 23 años de actividad laboral reconocida por delante!).
    Disculpadme por compartir con vosotros mi difícil situación, la lectura de este blog me ha "pillado" en un momento bajo... pero no me irían mal algunas ideas de personas como las que he encontrado por aquí.
    Un saludo!!
    Ana Maria

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  7. Hola Ana María, es complicado lo que comentas y no creo que tenga una solución sencilla. Lo único que puedo darte es mi ánimo para que continúes con ese espíritu de superación y que trabajes para superar el momento bajo y puedas llegar a una situación de cierta normalidad. No sé cual será tu enfermedad, pero si no te impide realmente dar rienda suelta a tus inquietudes, haz lo que sea para continuar en la brecha.
    Muchos ánimos!!
    un abrazo,
    Esther

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